CUIDA TU PIEL
La piel es el órgano más extenso de nuestro cuerpo y aquel que nos protege de todas las agresiones exteriores del medio. Pero algunos factores como las alergias, la sudoración, el uso de ciertas prendas sintéticas de ropa, la exposición excesiva al sol, o incluso el estrés o la intoxicación alimenticia, pueden generar “sarpullidos”. Éstos producen inflamaciones, sequedad, enrojecimiento o incluso ampollas en la piel que generan picazón o ardor. Aunque suelen no ser contagiosos, pueden generar mucha molestia y aparecer en cualquier parte del cuerpo. Para disminuir la irritación puedes aplicar algunas soluciones naturales que podrán aliviar la molestia y recuperar la salud de tu piel.
Aun así, debes saber que cada piel es diferente y posee distintas tendencias naturales que podrán variar el resultado en ti. Además, cada sarpullido tiene una causa diferente y es preciso que la conozcas, ya que ciertos sarpullidos pueden ser indicadores de problemas médicos. Si tienes alguna duda, consulta siempre a tu profesional de confianza.
Bicarbonato de sodio Sumerge la zona afectada por el sarpullido en agua con unas cucharadas de bicarbonato de sodio. Este elemento actuará directamente sobre tu piel aliviando la inflamación y comezón, ya que posee cualidades antisépticas, anti-inflamatorias e incluso antibacterianas. Avena Puedes aplicar avena en una compresa en la piel afectada para aliviar el sarpullido. Para hacerlo debes hervir un puñado de avena con agua hasta formar una pasta y, una vez que se enfríe, colocarlo con una gasa limpia. También puedes realizar un baño de avena, colocando una taza de este cereal crudo al agua del baño. Será una opción ideal para aliviar la irritación de la piel y reducir la inflamación, debido a sus propiedades calmantes y antiinflamatorias naturales. Manzanilla Las propiedades descongestivas, anti-inflamatorios, antibacterianas y antifúngicas de la manzanilla calman el picor, reducen la inflamación y promueven la curación natural de la piel. Para aplicarla, realiza una infusión con esta hierba y, una vez que tome temperatura ambiente, aplícala en la zona afectada con un algodón. También puedes darte un baño con unas gotas de aceite esencial de manzanilla para tratar las erupciones leves de la piel. Aloe vera La pulpa de aloe vera es una de las mejores soluciones naturales para tratar los sarpullidos cutáneos. Eso te ayudará a aliviar el enrojecimiento de la piel, sanar las ampollas en caso de que las tengas, desinflamar y recuperar su vitalidad.
Caléndula Debido a sus propiedades anti-inflamatorias, astringente, antifúngicas, antivirales y antibacterianas, la caléndula es una hierba ideal para calmar las irritaciones de la piel, erupciones, eczemas, piel seca y heridas. Su infusión es un remedio excelente para sanar las dermatitis, quemaduras, sarpullidos y otras afecciones de la piel. Para aplicarla, hazlo en una gasa humedecida, pasándola suavemente por la piel. Aceite de oliva Aplicar una pequeña cantidad de aceite de oliva extra virgen directamente en la zona afectada, ayudará a la curación, ya que contiene vitamina E y antioxidantes que reducen la picazón y humectan naturalmente la piel. Consuelda Para reducir la inflamación también puedes embeber un paño con una solución de consuelda y agua que puedas aplicar sobre la piel afectada. Esta hierba actuará naturalmente como un agente curativo para las heridas y erupciones de la piel.
OTROS CONSEJOS:
Consume vitamina C, que además de ser un antioxidante natural, ayudará a tu cuerpo a mantenerse protegido de las infecciones y estimular la curación de la piel.
Si notas que eres alérgico o hay algo en tu ambiente que te genera sarpullido, toma las precauciones necesarias para reducirlo o alejarte. No rasques o frotes la piel irritada.
Utiliza jabones neutros para limpiar la zona afectada.
Mantente sereno y trabaja para controlar el estrés.
Mejora la dieta. Incluye frutas, que son la mejor fuente de nutrientes como las vitaminas y los antioxidantes que son centrales para la salud de la piel.